El director de Asuntos de Frontera, Limítrofes y Marítimo, embajador Federico Perazza, explicó que una de las prioridades definidas por la Cancillería para el período de Gobierno 2020-2025 es la elaboración y aplicación de un plan nacional que revalorice las zonas limítrofes de Uruguay, como parte sustantiva de la política pública y exterior del país.
El Ministerio de Relaciones Exteriores trabaja, mediante una estructura institucional que permitió acuerdos con las repúblicas de Argentina y Brasil,para proteger los derechos de los ciudadanos fronterizos. En ese sentido, el Gobierno uruguayo apunta a la conformación de espacios orgánicos para una mayor articulación, sustentabilidad y relacionamiento con los estados limítrofes.
Como consecuencia de la pandemia por COVID-19, la frontera plantea desafíos sanitarios, económicos y de informalidad laboral, por lo cual, el Plan Nacional de Frontera posibilitará la conformación de una mesa institucional para coordinar entre los organismos que trabajan en esa zona, explicó Perazza, en diálogo con Comunicación Presidencial.
Entre los objetivos, señaló que es necesario profundizar la presencia de los estados en la frontera, mejorar la competitividad, promover la integración física y educativa para corregir asimetrías y trabajar en los desafíos vinculados con el turismo. Actualmente, Cancillería coordina acciones con la Dirección Nacional de Migraciones, la Dirección Nacional de Aduanas, los ministerios de Salud Pública, Desarrollo Social y Defensa Nacional, el Sistema Nacional de Emergencia (Sinae), las intendencias y municipios de frontera, las organizaciones internacionales y legisladores nacionales.
Uno de los temas que abordará el plan es el funcionamiento de los pasos de frontera donde hay problemas de infraestructura, tecnología o de intercambio de datos, mediante políticas focalizadas, a igual ritmo que los países limítrofes. Perazza informó que se trabaja con la Agencia de Gobierno Electrónico y Sociedad de la Información y del Conocimiento (Agesic) para generar un sistema georreferenciado que permita monitorear y distribuir responsabilidades en acciones de control integrado.
Otro de los objetivos es contribuir con la generación de políticas de educación en la zona fronteriza, facilitar la integración de las instituciones educativas y la presencia universitaria terciara en el litoral de Uruguay, por intermedio de las sedes descentralizadas de la Universidad de la República y de la Universidad Tecnológica, ya que se advierten desafíos en la movilidad de estudiantes entre países, reconocimiento de títulos y acreditación de carreras.
Infraestructura física proyectada en frontera
El Plan Nacional de Frontera incluirá una Comisión Nacional Fronteriza integrada por el Poder Ejecutivo, el Poder Legislativo, gobiernos departamentales, municipios y la sociedad civil organizada, que formulará, conducirá y evaluará las acciones acordadas de integración fronteriza, en concordancia con la política exterior de Uruguay.
En materia de infraestructura, Perazza recordó que se impulsa, a través de la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU), la construcción de un puente entre Bella Unión y Monte Caseros, para un mayor vínculo territorial con Argentina.
Con Brasil, en tanto, se pretende concretar la hidrovía de la laguna Merín, para conectar con la Laguna de los Patos y constituir un nuevo mecanismo que permita proyectar la producción cerealera, arrocera y forestal, que saldrá por el puerto de Río Grande. También en la agenda bilateral con Brasil se incluye la construcción del segundo puente en el río Yaguarón y la reconstrucción del puente Barón de Mauá, en el departamento de Cerro Largo.
