Foto: Gastón Britos – FutbolUy
Peñarol mereció ganar pero no fue preciso a la hora de la definición. Un claro penal por mano de Andrada no fue sancionado por Burgos.
Peñarol empató 0-0 con Progreso en el Capurro, su tercera igualdad al hilo y abrió la chance para que sus seguidores en el Clausura y Anual puedan dejarlo sin nada en la última fecha.
El partido comenzó con los mirasoles saliendo a presionar y tratar de ahogar a su rival, queriendo desbordar por las bandas y terminar por el centro con Bentancourt.
La lluvia, un actor de reparto en el trámite, hacía que el juego ganara en velocidad, con un local que se apoyaba en Colman para pivotear y en Andrada y Fagian para ser más ofensivo.
Lo cierto es que la pelota era del visitante, con Gargano manejando los hilos, Ceppelini apagado y poco participativo, e intentando con centros de Torres y Valentín Rodríguez todavía sin demasiada precisión.
Los minutos fueron pasando y ese dominio que tenía el carbonero no se transformaba en situaciones de peligro, con balones una y otra vez al área que los zagueros del equipo de La Teja se encargaban de sacar.
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La más clara llegó a los 33′ cuando un pase al vacío de Torres para la corrida de Giovanni González terminó en un remate al primer palo que se estrelló en el travesaño, zafando los de Fuerte de la caída de su valla.
Un tiro libre rebotado que se fue al córner fue lo más cercano del Gaucho que defendió la igualdad y la logró mantener hasta el final del primer tiempo, cerrando el 0-0 con que se fueron al descanso.
No hay mano que valga
Para el complemento Larriera decidió meter mano al equipo y colocó a Laquintana por Ceppelini, mientras que su adversario puso a Alex Silva por Nahuel Fagian.
Un disparo de Canobbio fue una prueba aunque sin fuerza que cayó mansamente en los guantes del golero que no pasaba mayores apremios.
A los 57′ volvió a tener otra posibilidad cuando Laquintana desbordó por derecha y puso un centro al medio que conectó Bentancourt de cabeza, pero Formento en buena acción defensiva logró despejar.
Los cambios fueron llegando en los dos, en un accionar que mantenía sus características desde el arranque, los aurinegros dueños del balón pero sin ser demasiado profundo, ante un Gaucho cerrado y marcando con creiterio.
Un centro de Valentín Rodríguez que bajó Carlos Rodríguez y terminó en un remate apenas desviado de Canobbio volvió a avisar de la cercanía a la apertura de un equipo cada vez más volcado al ataque.
Un disparo del propio Laquintana obligó a otra volada de Formento para apagar las alarmas y una caída de Bentancourt mientras peleaba una pelota con un zaguero local, fue pedida como pena máxima, pero terminó siendo desestimada.
La acción donde hubo un claro penal en favor de los mirasoles y no se pitó fue a los 75′. Un centro de Canobbio cayó al área fue bajado con la mano por Gonzalo Andrada y Burgos dedidió no pitarlo al entender que fue con el hombro, una interpretación de la cual se observó fielmente que estaba alejada a la realidad.
Los cinco minutos finales fueron de desesperación para los de Larriera, que creaban ocasiones pero no las podían concretar una y otra vez.
Una lesión muy dura de Valentín Rodríguez y el transitar inexorable de la adición para sellar el 0-0 sentenciaron el empate sin goles en el Capurro.
Peñarol de esta forma sumó su tercera igualdad al hilo, pero además le abrió la chance a Cerro Largo, Nacional y Plaza Colonia, que aún deben jugar, de meterse de lleno en la búsqueda del Uruguayo.
Fuente: FútbolUy
