El mandatario había decretado el martes la ley marcial, que fue revocada por el Parlamento y rechazada por buena parte de la población.
La moción presentada por la oposición de Corea del Sur para intentar cesar al presidente del país, Yoon Suk Yeol, por declarar el martes la ley marcial no alcanzó en el Parlamento la mayoría necesaria para salir adelante, después de que el partido gobernante salvara al mandatario pese a las críticas vertidas contra él estos últimos días.
La incertidumbre por la espantada de decenas de diputados llevó a que la votación quedase de hecho abierta durante varias horas, ya que técnicamente había margen hasta las 00.48 (hora local) del domingo, 72 horas después del momento exacto en que la oposición presentó la moción.
Woo, en vista de la paralización del proceso, renunció finalmente a agotar el plazo, aunque este primer intento fallido no supone el final de la historia. El líder de la oposición, Lee Jae Myung, confirmó que volverán a intentarlo para al menos aumentar la presión sobre el presidente.
El oficialismo está pagando ya este desgaste y el jefe de filas del partido gobernante, Choo Kyung Ho, presentó su dimisión al término de la sesión. El primer ministro, Han Duck Soo, subrayó por su parte que el Gobierno sigue plenamente operativo y hará todo lo posible para “estabilizar la actual situación”, informa la agencia Yonhap.
No se investigará a la primera dama
El Partido del Poder Popular de Yoon sí participó en una votación previa en la que se planteaba la apertura de una investigación sobre la primera dama Kim Keon Hee, por la presunta manipulación de las acciones de una empresa de importación de automóviles y la influencia en la designación de candidatos electorales.
Sin embargo, esta iniciativa tampoco prosperó, ya que logró 198 de los 200 votos requeridos por ley. Los otros 102 diputados votaron en contra de la creación de la comisión, pese a que seis miembros del ala oficialista aparentemente rompieron la línea de partido.
Protesta masiva
Una multitud se concentró este sábado en las inmediaciones del Parlamento para reclamar la dimisión o el cese de Yoon, que horas antes había pronunciado un discurso para pedir “disculpas sinceras” por decretar el miércoles la ley marcial tras el agravamiento de la disputa política con la oposición.
La Policía estima que unas 150.000 personas participaron en la protesta, mientras que los organizadores elevan la cifra hasta el millón, según la agencia de noticias Yonhap. También se celebró otra protesta alternativa de apoyo a Yoon, con una asistencia considerablemente inferior.
“La declaración de la ley marcial nació de la desesperación como presidente”, justificó el presidente, en un discurso en el que prometió que “nunca” volverá a imponer una medida similar. El decreto apenas estuvo vigente unas horas, ya que la Asamblea Nacional lo tumbó el miércoles de madrugada entre escenas de militarización en las calles de Seúl e incluso en el Parlamento.
Europa Press