El ministerio de ambiente realizó una puesta de manifiesto por el plazo de 10 días hábiles, en los que se podía plantear inquietudes y dudas sobre la propuesta de una empresa (VITATERRA) de instalar una planta de compostaje en el padrón rural N° 4192 en la zona de Nueva Hespérides.
Esta planta pretende compostar 100 toneladas diarias, equivalente a unos 20 camiones volcadora, los residuos provenientes de los frigoríficos (restos de sangre, rumen, grasas, etc.), de la planta de OSE, los lodos cloacales y restos de fruta. Una carga similar a la que se levanta todos los días por el servicio de Recolección de la ciudad de Salto.
El viernes pasado participamos en una reunión convocada por vecinos de Nueva Hespérides, Colonia Williams y Corralito, en la Escuela N° 35 donde se hicieron presente más de 200 personas ante la preocupación por la instalación de esta planta de compostaje en dicha zona. En esta oportunidad participó una ingeniera de la zona de Canelones, lugar donde ya funciona la misma empresa con una planta de características similares, donde expresó algunas de las consecuencias ante la eventual instalación de una planta de compostaje en el lugar.
Además de leer la documentación de la puesta de manifiesto, participamos de esa reunión informativa con vecinos y realizamos algunas consultas a profesionales y docentes de la universidad de la república vinculados a la temática. Es importante aclarar que la puesta de manifiesto es una instancia de participación pública donde los ciudadanos tenían la posibilidad de consultar y expresar sus dudas, pero venció el pasado 29 de julio.
Acá queremos puntualizar 3 cosas:
1. Es importante que contemos con tratamiento adecuado para este tipo de residuos, para los residuos cloacales que actualmente se tiran en el vertedero sin ningún tipo de tratamiento y para los residuos de los frigoríficos. Y también para los residuos de frutas de los packings y plantas de jugos.
Pero, Sr. Presidente, principalmente, entendemos que es imprescindible que se haga bien.
2. Es importante que la localización de la planta sea la adecuada, de acuerdo a las características del lugar y no solo porque a la empresa que realizaría el trabajo le queda más cerca y gasta menos en flete, y en esto incide el entorno socio-productivo, las características de la comunidad y el tipo de cultivo que tienen; pero también el tipo de suelos y la posibilidades reales de destino final de los productos de la planta: el compost, pero fundamentalmente el agua de lixiviado que es altamente cargada con nutrientes y puede contaminar las napas de agua de uso humano, animal y de riego.
3. Es importante garantizar el buen funcionamiento, y para eso será necesario contar con todos los controles y las garantías de los controles. No podemos olvidarnos que muy cerca de donde se pretende instalar esta planta, existió otra que pretendía compostar residuos de frigorífico, por las malas condiciones de funcionamiento dejó huella en los vecinos por: olores, derrames de residuos en los caminos, etc. Tampoco podemos olvidarnos de Trenal, la planta incineradora de residuos hospitalarios que entre gallos y medias noches se instaló en un predio municipal a fines de los noventa y que por el mal funcionamiento y la falta de controles hacía imposible la vida de los vecinos de barrio Artigas.
Nos parece importante que desde esta Junta Departamental podamos darle seguimiento al tema, por lo que proponemos que se pueda organizar una comisión específica para este tema, integrada con compañeros ediles de todos los partidos, pero también con integrantes de las comisiones de Salud, Legislación, Obras y Ordenamiento Territorial.
Por lo anteriormente expuesto solicito que mis palabras pasen a la comisión de Salud, Higiene y Medio Ambiente de la Junta Departamental y a las otras comisiones, a los vecinos de la zona, a la Universidad de la República y a la Intendencia de Salto.
Prof. Gabriel Scabino
Edil del Frente Amplio – Lista 95
