Se pretende instalar una planta de compostaje de residuos sólidos orgánicos en Nueva Hespérides. Existe unanimidad en cuanto a la necesidad de tratar adecuadamente estos residuos y que la técnica más recomendada es el compostaje, el tema se pone en debate por las dimensiones y localización de la planta.
Pretenden tratar 125m3 diarios (equivalente a un cubo de 5m de lado) de residuos provenientes de la planta de tratamientos cloacales de OSE, de los frigoríficos y de plantas de jugos y packings de frutas. En peso es similar a todos los residuos que se juntan diariamente de las viviendas particulares de la ciudad de Salto.
Nueva Hespérides, una de las principales zonas de cultivos hortofrutícolas del país, tiene acuíferos muy superficiales sobre suelos porosos, son vulnerables a contaminarse fácilmente afectando la inocuidad de los alimentos y la calidad de vida de productores y consumidores.
Los vecinos, preocupados, convocaron una asamblea abierta y lograron decenas de adhesiones para plantear ante la Intendencia de Salto y al Ministerio de Ambiente la inconveniencia de esta localización. Tenían muy presente una experiencia parecida que mal funcionó en la zona hace algunos años.
El Ministerio de Ambiente, de acuerdo a la normativa, abrió la “puesta de manifiesto” y publicó un documento elaborado por la empresa que pretende instalarse y por 10 días queda abierto a recibir planteos.
En ese marco, y desde mi rol como docente de la Universidad de la República, en el entendido que lo que a las palabras se la lleva el viento y que en una resolución del gobierno lo que hay que cumplir es lo que está escrito, participé junto a otros colegas docentes desde el Grupo de Estudios Territoriales en la elaboración de un documento que también entregamos a la Intendencia y a la Junta Departamental. Por eso concurrimos invitados por la Comisión de Salud y Ambiente de la Junta Departamental. En forma previa la Comisión recibió a vecinos, Intendencia y propietarios de la empresa que pretende instalarse y prevén invitar otros, como los Ministerios de Ambiente y de Salud Pública.
Está meridianamente claro que existen competencias concurrentes, entre el Gobierno de Salto y el Ministerio de Ambiente para realizar la habilitación para la instalación y operación de la planta.
El Gobierno Departamental con competencia en categorizar y regular el uso del suelo, en este caso rural productivo que no contempla la instalación de una planta de tipo industrial, debería iniciar un proceso de revisión parcial del plan de Ordenamiento Territorial a al menos, basado en lo que plantea el art. 76 del Decreto 6524/2011 emitir una resolución “fundada que contemple los aspectos económicos, ambientales y sociales” para autorizar.
Al Ministerio de Ambiente le compete lo que hace al proyecto, que la propuesta sea adecuada a sus fines, que no altere las condiciones de vida y producción en la zona, que no contamine las napas freáticas de donde se saca agua para consumo humano y para riego, etc.
También le competen los controles, y quienes recordamos lo que fue la experiencia de la planta que quemaba residuos hospitalarios en Barrio Artigas que hacía imposible la vida a los vecinos y hasta ameritó una interpelación en la Cámara de Diputados por la ausencia de controles, deberíamos exigir las garantías necesarias para que ellos se cumplan en tiempo y forma.
Otro elemento importante es que la planta sería la única en Salto, y en Uruguay tenemos algunas malas experiencias con los monopolios privados, razón por la que quisiéramos ver un plan de negocios que garantice que la planta tendrá una viabilidad económica financiera que de instalarse funcione de buena forma.
Por último, destacar que encontré que todos los integrantes de la Comisión de la Junta están sinceramente sensibilizados y preocupados con el tema, razón que los lleva a ocuparse. Confiamos en que tengan la capacidad de convencer al resto de los ediles, a la Intendencia y al Ministerio de Ambiente que si se hace tiene que serlo en buena forma. Los ciudadanos podemos ayudarlos.
Arq. Rogelio Texeira