El Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), el Instituto Nacional de Bienestar Animal (INBA), la Comisión Nacional Honoraria de Zoonosis (CHNZ) y la Fundación Marco Podestá de la Facultad de Veterinaria acordaron la entrega de 30.000 collares para canes en Salto y Bella Unión, a fin de combatir la leishmaniasis. Las instituciones procuran evitar que el vector infectado afecte a los animales e incluso a seres humanos.
El anuncio fue realizado en la mañana de este viernes 1.° en el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA), en Salto Grande, por parte del ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Fernando Mattos, la ministra de Salud Pública, Karina Rando, y la directora general del MGAP, Fernanda Maldonado. También asistieron autoridades del INBA y de las demás instituciones involucradas.
El documento suscripto permitirá a las instituciones trabajar en conjunto para definir estrategias y la coordinación de acciones, a efectos de colocar a canes 30.274 collares, donados por una empresa, para combatir el vector de la leishmaniasis. La enfermedad se transmite a través de un mosquito infectado, que afecta a los perros y no tiene cura, explicó Mattos. Agregó que, además, es un factor de propagación y que también se contagia a los seres humanos. “Prevenir la proliferación de esta enfermedad es un política pública importante”, afirmó.
El acuerdo permite articular la entrega de los collares, que se sustituyen cada seis meses, para brindar una acción continua y evitar que el vector infectado afecte a los animales. “Esto es un tema de articulación entre salud y también de bienestar animal”, señaló. En ese contexto, el ministro indicó que los collares son destinados a una población de bajos recursos, y el proceso de distribución iniciará en Salto y Bella Unión, zonas donde está presente la enfermedad.
Los perros que reciban collares tienen que estar con chip, precisó el ministro, y destacó la importancia de la castración para evitar la superpoblación canina. “De ser exitosa esta práctica, seguramente tendremos un freno para que no se disemine a otras regiones del país”, sostuvo Mattos, y consideró que el plan es importante por la articulación de diferentes organismos y por la generación de la conciencia pública. “Tenemos que convencer también a aquellos que tienen condiciones económicas para aplicar los collares, para que protejan sus animales y la familia que está en contacto con los mismos”, concluyó.
Maldonado, en tanto, refirió a la intervención en animales de compañía en departamentos del norte del país, que según indicó, conlleva además, capacitación y sensibilización sobre la implicancia de tenerlos en el hogar. El rol de IMBA es la coordinación y la intervención puntual en la asistencia técnica en cuanto a la identificación y castraciones, detalló.
Rando, por su parte, informó que en Uruguay se registraron únicamente nueve casos de la leishmaniasis. Al respecto, indicó que los médicos deben aprender a diagnosticar la enfermedad para que posteriormente se realice un tratamiento sintomático. “Lo más importante es prevenir”, afirmó, y añadió que si el paciente está inmunodeprimido es más fácil que se contagie.