Una de las claves de la respuesta a la pandemia de Covid-19 en Uruguay ha sido el comportamiento del Sistema Nacional Integrado de Salud conducido de forma activa por el Ministerio de Salud Pública. En diálogo permanente con los diferentes actores de la salud como los prestadores y sindicatos, y en el marco de estado de Emergencia Sanitaria declarada el 15 de marzo, se habilitó como primera línea de atención válida la telemedicina y se dispuso la reprogramación de la actividad quirúrgica y estudios médicos no urgentes.
Foto examen cardiológico
En diálogo permanente con los diferentes actores de la salud como los prestadores y sindicatos, y en el marco de estado de Emergencia Sanitaria declarada el 15 de marzo, se habilitó como primera línea de atención válida la telemedicina y se dispuso la reprogramación de la actividad quirúrgica y estudios médicos no urgentes.
De esta manera se logró conseguir la continuidad asistencial en una primera etapa de la pandemia en que se incitó a la población a que se quedara en su casa con el fin de evitar la propagación del virus SARS- CoV-2. En todo momento se mantuvieron los tratamientos y cirugías oncológicas urgentes.
A fines de mayo, ante la estabilización en el número de casos de Covid-19, se autorizó el inicio de la reprogramación de cirugías electivas o de coordinación que habían quedado postergadas. Entre junio y noviembre la atención en los centros de salud era de complementariedad entre la telemedicina y consultas presenciales.
En el continuo monitoreo de la marcha de la pandemia en el país, en noviembre las autoridades sanitarias de esta cartera consideraron necesario restringir la atención presencial en los departamentos de Canelones, Montevideo, Rocha y San José por la constatación de un importante aumento en el número de casos de Covid-19.
A pesar de tener que tomar esta decisión, se comenzó a elaborar un Plan de normalización de la atención médica para lograr volver a los niveles normales de atención en un plazo estimado de 120 días. Con este fin es que se solicitó a los prestadores de salud información sobre listas de espera existentes y cuál era la disminución registrada en la actividad quirúrgica y de estudios diagnósticos.
Ante la actual tendencia a la baja en el número de nuevos casos de Covid-19 y estabilizada la cantidad de pacientes en cuidados críticos, se ha dispuesto la puesta en marcha del Plan de normalización de la atención médica con el restablecimiento de la atención presencial en todo el territorio nacional – con las necesarias medidas de prevención de contagios – y la prioridad establecida para las enfermedades crónicas no trasmisibles.
El Plan de normalización de la atención médica será incluido dentro de las exigencias de las metas asistenciales para una normalización progresiva de toda la atención a partir de que se complete la vacunación del personal de la salud.
Fuente: MSP