La incorporación de seis aviones A-29 Super Tucano a la Fuerza Aérea fue calificada como histórica por el ministro de Defensa Nacional, Armando Castaingdebat, debido a que el país no adquiría aeronaves desde 1981. El jerarca indicó que el contrato con la empresa brasileña Embraer responde al compromiso de fortalecer, recuperar y modernizar la capacidad operativa de las Fuerzas Armadas.
Castaingdebat informó, en una conferencia de prensa, que en la reunión mantenida este miércoles 28 con el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, dialogó acerca de la adquisición del Gobierno nacional de seis aeronaves A-29 Super Tucano nuevas para la Fuerza Aérea Uruguaya (FAU).
El jerarca estuvo acompañado por el canciller Omar Paganini; el comandante en jefe de la FAU, Luis Héber De León; el embajador brasileño en Uruguay, Marcos Raposo, y el vicepresidente de Embraer, Fabio Caparica.
“Hoy, Uruguay y la Fuerza Aérea están viviendo un día histórico, (porque) desde 1981 el país no adquiría aviones de combate nuevos”, destacó Castaingdebat.
El jerarca subrayó que la iniciativa se basa en un compromiso del presidente Lacalle Pou de fortalecer, recuperar y modernizar el potencial operativo de las Fuerzas Armadas. En este caso, reconoció que la fuerza del aire “estaba al límite de su capacidad”. Agregó que la adquisición también responde a una “definición país” de proteger, fortalecer y blindar las fronteras ante el tráfico ilícito y el narcotráfico. Además, consideró que la acción contribuirá a “devolverles la motivación” a muchos jóvenes de ingresar a la Fuerza Aérea.
El fabricante brasileño Embraer comenzará a entregar los aparatos desde 2025 y por los siguientes dos años, la base estará en el aeropuerto de Durazno. La inversión fue del orden de los 104.000.000 de dólares y la negociación incluyó un simulador y un paquete logístico integrado. Uruguay se incorpora, así, a un grupo de países latinoamericanos que utilizan estas aeronaves, integrado por Brasil, Chile, Colombia, Ecuador y Paraguay.
Paganini, por su parte, opinó que la defensa del país “es fundamental para la autonomía como nación soberana e independiente”. La adquisición, dijo, forma parte de la esencia de un estado moderno, que vigila su espacio aéreo con el tipo de plataforma necesaria, como la que aportan estas aeronaves.
Asimismo, indicó que la operación representa un hito en el relacionamiento bilateral con Brasil, impulsado por los presidentes de ambos países y que se suma a otros, como los proyectos del aeropuerto binacional de Rivera, el segundo puente sobre el río Yaguarón, entre la ciudad norteña homónima y la uruguaya Río Branco, y el dragado del canal San Gonzalo, que conecta las lagunas Merín y de los Patos. Puntualizó que, con los “países hermanos” de Argentina y Brasil, Uruguay transita una situación muy favorable que, consideró, hay que profundizar.
En tanto, De León subrayó el concepto de “seguridad en la defensa del espacio aéreo” y el avance que significa en la capacidad tecnológica, que permitirá mejorar la función de control del espacio aéreo y de las fronteras. Indicó que estos aviones pueden interceptar aeronaves de bajo desempeño que hoy están “acosando” al país.
Agregó que la FAU promueve que las nuevas generaciones se desarrollen con la tecnología que aporta este eficiente modelo. La adquisición comprende un simulador de vuelo, único en la región, que permitirá, de modo adicional, que las fuerzas de otros países realicen su entrenamiento en Uruguay.
El jerarca informó, asimismo, que en el país hay solo dos pilotos capacitados para volar aparatos A-29 Super Tucano, por lo cual se instruirá a otros durante los próximos meses. El equipamiento también incluye un sistema electroóptico para el control de fronteras, que apoyará a unidades en tierra, finalizó.