El actual gobierno, en un hecho que no hace más que reconocer el fracaso de la política de seguridad, plantea modificar la Constitución Nacional para habilitar los allanamientos nocturnos. Es reincidente, lo habían planteado junto a las elecciones de 2019 y la ciudadanía les dijo que no.
La solución que oportunamente dio el constituyente ha sido sabia; estableció que el hogar es un sagrado inviolable, porque es un reducto o refugio de la familia que en horas de la noche no debe ser perturbado y actúa en consecuencia. La propuesta elimina la inviolabilidad del hogar durante la noche, permitiendo allanamientos en cualquier horario.
Los allanamientos nocturnos son presentados por sus defensores como una solución a la inseguridad y la violencia, pero que analizada en profundidad es demagógica, porque no existe ni mencionan ninguna evidencia que haría un país más seguro; con suerte podría ayudar en combatir el menudeo, pero nunca al gran narcotráfico.
Reformando la Constitución no se combate al narcotráfico; los narcos no tienen la droga en su casa.
Si hay múltiples bocas de venta de droga es porque ingresa ilegalmente al país; en Uruguay, salvo marihuana, ni se planta ni se producen drogas de las llamadas duras. Si realmente quiere combatirse el problema de fondo hay que dar una lucha frontal al ingreso de la droga, sea por aire, mar o tierra. No existe microtráfico sin macrotráfico.
Políticas de Estado
Uruguay necesita una política de Estado de combate al microtráfico, pero no es cierto que sin allanamientos nocturnos se dé vía libre a los delincuentes, porque se puede rodear el lugar, hacer un control efectivo de la zona y allanar con orden judicial a la salida del sol.
Esa política tendrá que ser parte de las políticas de seguridad, pero imprescindiblemente deberá ser parte de una más grande en la que también se busque por ejemplo rehabilitar adictos, recuperar y brindar oportunidades de trabajo y vivienda a quienes salgan de las cárceles, etc.
Uruguay también requiere una política de Estado de combate al gran narcotráfico, dotando de los recursos materiales, tecnológicos y humanos adecuados para ello.
Hemos visto en las noticias como toneladas de drogas que han salido de Uruguay por el puerto de Montevideo y es posible pensar en que entra y sale por vía aérea sin control alguno. Sin ningún tipo de dudas decimos que son imprescindibles más controles, se necesitarán más scanners y seguramente más recursos humanos calificados.
Pero, especialmente actuar donde más duele al sistema, que es en el control irrestricto del lavado de activos. Los partidos de la coalición que promueven los allanamientos nocturnos como medida mágica de combate al narcotráfico son los mismos que debilitaron con la LUC los controles al combate al lavado de activos, llevando a 150 mil dólares el límite para el pago con dinero en efectivo, aumentado en 25 veces el límite existente y debilitando también las medidas de control.
Urge aumentar los controles y fortalecer a los organismos de contralor, con más potestades legales, pero de nuevo con recursos materiales, tecnológicos y humanos.
Los peligros
Nada dicen los que lo promueven de los peligros que representa, por las dificultades de visión durante la noche ¿qué sucede si hay un error en la identificación de la vivienda, si hacen un allanamiento equivocado? Quién se va a hacer cargo de la situación, quién va a ser el que repara el daño. En estos días hemos visto copamientos nocturnos de personas que haciéndose pasar por policía ingresaron violentamente a una casa y mataron a una persona que estaba durmiendo. Si se habilitan los allanamientos nocturnos, quién asegura que no se usará de este mecanismo por parte de delincuentes, haciéndose pasar por policías.
Cómo controlar y asegurar que el papel con la orden de allanamiento que exhibe es real y ha sido emitida por un juez, como manda el artículo 11 de la Constitución. Nada dicen los promotores de los peligros que puede traer aparejado habilitar una medida de este tipo en horas de la noche, peligros de un mal procedimiento (se equivocan de lugar, como ha pasado muchas veces en los allanamientos que se hacen durante el día), de un uso ilegítimo de delincuentes que se hagan pasar por policía. Basta pensar en la cantidad de armas y de uniformes de la policía en manos de la delincuencia.
No vemos que en la propuesta se tome en cuenta el poder de fuego de los delincuentes, cuanto más difícil y engorroso puede ser un tiroteo con la policía en la oscuridad que aumenta las chances de policías heridos o incluso de víctimas inocentes.
No hay previsión alguna de la formación necesaria que debe tener la policía para actuar durante la noche, ni del equipamiento, ni del protocolo a seguir. En estos días el sindicato reclama de las autoridades información.
Tampoco se prevén las garantías para el allanamiento, si van a estar los jueces o los fiscales presentes controlando el procedimiento,
Soluciones mágicas vs. Políticas de Estado
Estas magias surgen de los mismos que prometían que con más poder a la policía bajarían los delitos, que no ocurrió y los delitos violentos siguieron aumentando; de los mismos que decían en los gobiernos del FA que era inaceptable que se hablara de ajuste de cuentas y hoy tratan de explicar los aberrantes homicidios como ajuste de cuentas por negocios vinculados a drogas ilícitas.
No pueden controlar las drogas en espacios confinados como las cárceles, el viernes se hizo un nuevo procedimiento y nuevamente encontraron droga. Es difícil de creer que allanando de noche puedan controlar las drogas en los domicilios.
El mismo método que con la LUC, que solucionaría de forma mágica todos los problemas de seguridad, ahora los allanamientos nocturnos. No pueden tratar de ingenuos a los uruguayos.
Es necesario un gran diálogo nacional para acordar medidas efectivas. Desde Seregnistas-Salto estamos planteando la necesidad de construcción de políticas de Estado en el tema seguridad para ejecutar en el tiempo independientemente al color político del gobierno. Pero para ello es necesario dejar de pensar que con magia se soluciona, solo será posible trabajando sobre la realidad.
Trabajar en ese sentido es nuestro Compromiso.