El dirigente nacional del SUNCA y actual tesorero del Fondo de Vivienda del sindicato, el salteño Pablo Torrens, brindó detalles sobre las maniobras irregulares detectadas en el manejo del Fondo y el impacto que este hecho ha tenido dentro de la organización.
Según explicó Torrens, las irregularidades comenzaron a detectarse en diciembre del año pasado, cuando se identificaron transferencias no autorizadas desde el Fondo de Vivienda hacia personas vinculadas al sindicato, incluidos algunos miembros de la dirección nacional.
Ante esta situación, el SUNCA decidió actuar con firmeza. “El sindicato tomó la iniciativa de presentar una denuncia penal y dejó claro que no existe posibilidad de acuerdo abreviado”, indicó Torrens. En las últimas horas, al menos tres personas fueron conducidas a Fiscalía como parte de las investigaciones.
“Sin lugar a duda fue un golpe muy duro, ya que se defraudó la confianza del sindicato y de los trabajadores. Nuestro sindicato tomó la determinación de expulsar a quienes no respetaron los principios éticos y morales que la organización exige», aseguró el dirigente.
Pese a la gravedad del caso, Torrens recalcó que el Fondo de Vivienda continúa funcionando con normalidad. “Los beneficios se mantienen plenamente operativos. Desde su creación, el Fondo ha otorgado cerca de 40.000 préstamos. Hoy en día se entregan unos 200 préstamos mensuales para la compra de materiales”, señaló.