Este sábado 2 y domingo 3 de octubre se desarrolló el VII Congreso del Frente Amplio, más de 1200 representantes de Comités de Base del Frente Amplio de todo el país y el exterior, dieron una discusión fraterna en tres comisiones, sobre el balance, la crítica y la autocrítica de los 15 años de gobierno y el análisis sobre lo sucedido en las elecciones nacionales de 2019, donde nuestra fuerza política pierde el gobierno.
Solamente el Frente Amplio como fuerza política democrática puede realizar esta discusión con enorme amplitud, que representa una de las expresiones más notables de una fuerza política viva, activa y movilizada, donde la participación responsable es una identidad frenteamplista, que permite poner en discusión todos los temas, sin restricción ni exclusiones, en un debate fraterno, donde primo los acuerdos a las discrepancias.
Sin dudas que se plantearon distintos puntos de vista, visiones tanto del abordaje de la crítica y la autocrítica, discusiones que ayudaron a muchos poder nutrirse de estos puntos de vista para poder comprender en integridad lo sucedido en estos últimos años. El debate franco entre compañeros y compañeras permitió poder arribar una síntesis que representara no solo a los 1200 congresales, sino a toda la militancia frenteamplista, consolidando la unidad en la diversidad que es la base de la acción de nuestra fuerza política.
En la declaración final del VII Congreso caracteriza que “en nuestro país vivimos bajo un gobierno de derecha, de orientación neoliberal, restaurador y regresivo, con impactos negativos en lo económico, lo social y lo cultural”. “En lo económico, sólo favorece a sectores concentrados de la economía –los ‘malla oro’– mientras ha puesto el centro en el equilibrio fiscal, regateando la inversión y el gasto social, ignorando la tendencia mundial a invertir para afrontar las consecuencias de la pandemia”, se afirma, y se agrega que además acompaña a esas acciones “una embestida contra el Estado para llevarlo a su mínima expresión, una negación hacia la principal fuerza política y una intolerancia hacia los movimientos sociales que corre el riesgo de erosionar la calidad democrática. La aprobación de la LUC es el indicador más claro de esta orientación”.
Y en esta etapa se viene la gran batalla para derogar en un plebiscito a realizarse por marzo del 2022, los 135 artículos de la LUC y para eso este Congreso definió claramente la estrategia a llevar a cabo y habilitó a la elección interna a realizarse este próximo 5 de diciembre a tres valiosos compañeros como lo son Fernando Pereira, Ivone Passada y Gonzalo Civila, donde uno de ellos conducirá nuestra fuerza política en los próximos 5 años.
