Carlos Silva, el edil mano de yeso, quedó sin memoria (Por Álvaro Gómez – Lista 228 EnFA)

Carlos Silva, el edil mano de yeso, quedó sin memoria (Por Álvaro Gómez – Lista 228 EnFA)

Recientemente, durante una entrevista radial, escuché al señor edil Carlos Silva Rattín del Partido Nacional. Cuando lo conocimos en la Junta Departamental de Salto entre 2010 y 2015, le llamábamos “el mano de yeso”, apodo que se le atribuía por su predisposición a votar a favor de todas las propuestas del intendente de aquel entonces y de la coalición encubierta. Su mano siempre estaba en alto.

En dicha entrevista, el señor Silva Rattín mencionó la necesidad de una mejor actitud por parte de los diputados del departamento de Salto. Sin embargo, en la vida es crucial actuar conforme se habla. Si hablamos de actitud, lo primero que debería hacer es renunciar a su cargo remunerado en Salto Grande, como lo resolvió el Parlamento en 2023. Esa sería una auténtica demostración de actitud.

En otro momento de la entrevista, se refirió al sector Gramon de la Intendencia como un cementerio de maquinarias. Pero el verdadero cementerio fue el legado que el Partido Colorado y su Partido Nacional nos dejaron. Era un lugar donde nada funcionaba, y fue necesario realizar un remate para deshacernos de la chatarra que nos entregaron.

Además, en el sector Gramon se proporcionaron mejores condiciones para los funcionarios durante el primer periodo de la Administración Lima. Se establecieron oficinas para los administrativos y todas las cuadrillas que trabajan allí. Se construyeron 8 baños con 2 duchas, un salón multiuso y una cocina equipada, mejorando significativamente las condiciones laborales, algo que ninguna administración anterior había hecho.

Actualmente, hay 32 cuadrillas de obras tanto en la ciudad como en el interior, hay cuadrillas que se encargan del mantenimiento de edificios públicos y bienes municipales, una labor que la oposición no pudo llevar a cabo cuando fue gobierno.

La acusación de falta de combustible es completamente infundada, ya que diariamente se ven máquinas trabajando en toda la ciudad. Quizás lo que intenta es distraer la atención de la crisis en Salto Grande, que actualmente no puede pagar los sueldos debido a la gestión deficiente de ustedes, los blancos y los colorados.

La administración actual ha logrado mantener al día el pago de la deuda del Fideicomiso, una deuda que usted y la coalición de aquel entonces dejaron. Con los 232 millones que se han pagado hasta ahora, podríamos haber construido 90 cuadras de hormigón o 725 cuadras de riego bituminoso. Ha sido un esfuerzo considerable devolver a Salto lo que la coalición colorada-blanca de 2010 a 2015 destruyó.

Los ex obreros de la represa de Salto Grande merecen respeto y consideración. Prometieron resolver la reparación económica que vienen reclamando en este período, pero han incumplido. Sin embargo, hay 2.000.000 de pesos anuales destinados a 35 personas colocadas a dedo, la mayoría ediles del Partido Nacional que se niegan a renunciar.

La diferencia entre ustedes y nosotros es clara. Desde la Intendencia, mostramos solidez financiera, garantizamos el pago puntual de los salarios de nuestros funcionarios, realizamos obras de infraestructura que transforman barrios enteros y adoptamos tecnología moderna, como el primer bus eléctrico. Mientras tanto, ustedes destruyen todo lo que tocan, saquean las arcas del Estado y desfinancian instituciones como la CTM.

Le pido, señor “mano de yeso”, que no olvide estos hechos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *